La rutina de tu piel a partir de los 40 años.
Cómo cuidar la piel a partir de los 40 años
Los cuidados de la piel varían con la edad y serán diferentes en función del estilo de vida, la genética y los cuidados previos que haya recibido. A los 40 es necesario modificar la rutina facial de los 30 y comenzar a optar por productos que se adapten, nutran y protejan mejor la piel.
Es posible lucir una piel bonita, unificada e iluminada a los 40 siempre y cuando cuentes con una rutina de cuidado facial que se adapte a tu tipo de piel. Es decir, al llegar a esta edad tu piel necesitará nuevos ingredientes para atenuar mejor las arrugas y recuperar elasticidad.
¿Qué buscamos con esta rutina facial para después de los 40?
Principalmente, buscaremos estimular la producción natural de colágeno y elastina, que son las encargadas de mantener la piel lisa y tersa.
Pero no solo es importante contar con una rutina facial especial, sino también con una alimentación saludable y equilibrada y mucha, pero que mucha, hidratación y vitamina C y A.
Si eres una persona que se ha cuidado a lo largo de los años, es más que probable llegar a los 40 luciendo una piel de 30 o 35 años.
¿cómo saber que la piel necesita cambiar de fase y una nueva rutina de cuidado facial?
Evaluando si aparecen los siguientes signos de envejecimiento celular:
- La piel está más fina y apagada. Hay varios motivos por los que la piel se ve más apagada, falta de luminosidad. Todos nos podemos imaginar una superficie lisa al reflejo de la luz, o una superficie rugosa al reflejo de la luz. En la lisa refleja la luz como lo puede hacer un espejo, los haces de luz se reflejan de moda regular. Sin embargo la superficie rugosa (aunque sea poco) va a reflejar la luz de forma dispersa, de forma irregular, los haces de luz se reflejarán en diferentes direcciones. Eso va a hacer que no se vea ni regular ni brillante. Por lo que uno de los principales motivos de la piel con falta de luminosidad es cuando la piel está rugosa, o los agentes que hagan que este menos fina.
La deshidratación, el poro se dilata y pierde elasticidad. La falta de tersura o flacidez. Si la piel tiene muchas células muertas, se verá más apagada, las células muertas harán que se rugosa, son células que se van descamando.
- Aparición de manchas solares o manchas rojas en la piel. La radiación del sol penetra en la piel y activa los melanocitos que producen melanina (es un pigmento oscuro y que genera el color de nuestra piel, ojos y pelo). Cuando esta melanina se genera en exceso se producen estas irregularidades llamadas manchas solares. Las manchas rojas salen por la rosaea, psoroasis… La solución es usar protección solar todos los días de SPF50 y repetir cada 2 horas si estamos expuestos al sol.
- Pierde progresivamente elasticidad y tono. El paso de los años hace que pueda aparecer la temida flacidez, en el rostro o en el cuerpo, algo que es inevitable que suceda, pero para lo que existen multitud de tratamientos de medicina estética encaminados a combatirla. Conforme avanza el tiempo la estructura de la piel se va rompiendo debido a la gravedad y a los años que cumplimos, además, tampoco se renueva con tanta rapidez como antaño y la piel está menos firme y tersa.
Las células de la epidermis, según pasa el tiempo, van perdiendo su poder de regeneración y su capacidad para contener las fibras musculares, por eso el peso acaba ganando la batalla y la piel queda descolgada. Esto no es algo que suceda solamente a una edad avanzada, ya que hay motivos y factores externos que también pueden acelerar el proceso de pérdida de tono de la piel. Y es que la forma en la que vivimos, los hábitos y rutinas diarias, la alimentación… también influyen en que se pueda ir perdiendo la elasticidad de la piel, debido a que no estemos cuidando aquello que la mantiene tersa y propiciemos un envejecimiento prematuro de la misma.
Perder o ganar peso rápidamente, el efecto del sol o la genética también contribuyen a que la piel pierda su firmeza y se vuelva flácida. Además, las personas que fuman experimentan un envejecimiento más veloz que las que no lo hacen. Llevar una dieta equilibrada y saludable, protegerse del sol a diario y evitar hábitos como el tabaco pueden ayudar a que la piel se mantenga firme por más tiempo. Es esencial, igualmente, que esté adecuadamente hidratada y limpia.
- Se empiezan a atenuar ciertas arrugas o líneas de expresión. Es normal que a partir de los 40, además de las líneas de expresión y las arrugas, la piel del rostro presente manchas, más o menos visibles, según cómo te hayas protegido del sol. También es habitual que la piel empiece a mostrar los primeros signos de la flacidez. Las dos causas de la flacidez son la pérdida cada vez más acentuada del colágeno y la elastina que provocan que la piel del rostro vaya perdiendo el aspecto terso de su juventud.
Hay otros problemas que también preocupan a partir de los 40, como la pérdida de la luminosidad e imperfecciones, como el poro dilatado o una textura irregular. Desde Farmacia Pilar Blanco te aconsejamos que lo ideal es personalizar siempre los cuidados, teniendo en cuenta el estado de tu piel.
Para potenciar los resultados de las cremas, podemos introducir la nutricosmética. Los suplementos alimenticios antiedad ayudan a frenar el envejecimiento desde dentro. Deben ser siempre un complemento a nuestra dieta, a las cremas y a un estilo de vida saludable. En Farmacia Pilar Blanco te recomendamos Unique Pink Collagen o el colageno de Goah Clinic.